Me pasó de todo la semana pasada, incluyendo terminar un trabajo importante en el último minuto, y llegué al viernes con un resfrío de aquellos que de súbito alcanzan proporciones épicas. Entre deadlines, actividades escolares de mi hija y el malestar de la fiebre, no me percaté de que Rock in Rio 2011 ya habia empezado y que incluso era posible verlo vía live streaming por Youtube. Bueno, comprendan, es que el mundo ha cambiado bastante desde el primer Rock in Rio, a mediados de los 80s, cuando yo estaba apenas por cumplir mis 20 años… y a veces no me acabo de acostumbrar.
En fin, haciendo uso de las cibernéticas modernidades, consulté la programación online y casi me muero en mi lecho de enferma al darme cuenta de que ya me había perdido a los Red Hot Chili Peppers, Metallica y a Jamiroquai. Buahhh!! Pero en ese momento estaba el monstruo sagrado Stevie Wonder en vivo, y me colgué de la transmisión. Es que me encanta Stevie, desde mis 14 añitos siempre quise verlo en vivo, y cómo les explico, verlo en vivo en mi laptop desde un festival como Rock inRio era lo más aproximado que he podido estar a verlo en vivo en mis 45 años de vida.
Ver a un veterano como Stevie Wonder junto a Janelle Monáe (a quien recién este año conocí por su «Tightrope«) fue extraordinario, y su versión de mi gran favorita Overjoyed, que he esperado poder ver en vivo por tantos años (aunque fuera virtualmente) no me decepcionó.
De allí fue ya no despegarme del festival, y qué bueno, porque lo mejor estaba por venir: la actuación de Coldplay fue absolutamente extraordinaria, tanto a nivel musical como de show y dominio de escena; y perdónenme el entusiasmo, pero para mi gusto personal fue lo mejor de todo el festival, por lo menos de lo que pude ver. Una de los mejores momentos fue su interpretación de Viva La Vida: casi se viene abajo el lugar.
Y a juzgar por las reacciones del público, creo que todos pensaron o sintieron lo mismo que yo; Chris Martin se metió a la enorme concurrencia al bolsillo sin dificultad. Toda la masa lo seguía tan en trance que creo que si les pedía «suicídense» todos se suicidaban en el acto, sobre todo cuando cantó The Scientist:
noooooobody saaaaaaid it was eaaaaaasy
it’s such a shame for us to part…
noooooobody saaaaaaid it was eaaaaaasy
no one ever said it would be so hard
I’m going back to the start
Pese a mi lamentable estado gripal sucumbí al entusiasmo, no me aguanté y tuitié por el canal del festival:
El Twitter hervía en ese momento con los hashtags #RockinRio y #Coldplay, comentarios como:
No faltó Clocks, que fue una apoteosis aparte, seguida de un emotivo tributo a Amy Winehouse (Fix you), muy celebrado por el público presente y por el público tuitero también.
En resumen, que fue un evento memorable, y si quienes lo vimos solamente por Youtube casi tuvimos un orgasmo mirándolo a miles de kilometros, ya me imagino lo que habrá sido estar allí en persona.
Para el domingo, la fecha de cierre, estaban anunciados Evanescence, System of a Down y como cierre, Guns N Roses; también el domingo me enteré que lo que me tenía remal no era sólo una gripe, sino bronquitis. Para cuando me pude conectar, ya SOAD iba por la mitad; fue una memorable performance (después nos daríamos cuenta de que había sido lo mejor de la noche), pero lo más divertido fue que tuiteando me encontré con algunas de mis alumnas, en el mismo plan que yo… aunque claro, por razones generacionales yo esperaba a los Guns. Cómo les explico, son parte de toda una época de mi vida. Y así, esperándolos, me soplé a la archi creepy banda Slipknot (que ya es francamente too much para mí) mientras la gente en el twitter contaba chistes y se c*gaba en la madre de Axl Rose para amenizar la tediosa espera.
Hasta que salieron. Pero habia un pequeño problema; la diferencia entre lo que esperábamos escuchar y lo que escuchamos fue bastante grande. El problema no era que Axl esté viejo, se vea pasado de peso o que ya no cante como antes; el asunto era que todos los viejos fans de los Guns teníamos muy presente el sonido y el poder de la formación original de la banda, es decir, de la banda original, de cuando Slash era parte de ella. Y lo que nos ofrecieron anoche Axl y sus nuevos músicos más parecía un «tributo a» Guns N Roses. Con decir que para cuando al fin arrancaron con Sweet Child of Mine el punteo inicial fue tan soso que hasta daba pena. Y eso que, no estoy segura, pero me pareció que lo estaban haciendo entre dos. De hecho, en algún momento del concierto creo que vi tres guitarristas en escena (corríjanme si me equivoco), y si no es porque los ví no me daba cuenta…. es decir, no se les sentía. Tres guitarras es como para matarte con distorsión si les da la gana, pero no fue el caso…
A esas alturas ya eran casi las 2am, el twitter se había convertido en un gran campo de bullying contra Axl Rose y yo ya había visto suficiente. Me fui a dormir, pensando (como otro tuitero) en que prefería mantener el cariño a los Guns N Roses de siempre, esos que ya tienen su lugar ganado entre las leyendas del rock. Y es que, aunque estábamos algo apenados por la diferencia entre lo que esperábamos y lo que vimos, a los Guns se los respeta por sus discos y su historia… y se les quiere por todo lo que tiene que ver su música con nuestras propias historias.
Y bueno… a esperar a Rock in Rio 2013!
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Los años no pasan en vano, ni para los famosos. Mejor es no comparar, disfrutarlos en su momento actual y tener siempre en cuenta su época de oro.
Como sea, se nota que lo disfrutaste.
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Sí Gabriela… pos pa’ qué te digo que no, si sí 🙂
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Caramba, buen retrato de lo que has vivido y lo que hemos vivido millones al experimentar tantas emociones y disfrute a través de la pantalla de YouTube. Sueño con estar presente en los próximos Rock In Rio, pero si el destino no se presta para el asunto, siempre nos quedará San YouTube para darnos el placer…
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De hecho los excesos le han pasado la factura al buen Axl, pero sigue siendo un ícono que llena estadios y mantiene vivo el legado de los GNR, mientras que no se sabe mucho de los exmiembros originales de la banda.
Por otra parte, coincido en que lo mejor de Rock en Rio 2011 fue Cold Play!!!! El concierto de Maná también fue notable, hace tiempo no los escuchaba en vivo, así que fue grato para mí verlos de nuevo.
Saludos
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@Luis, sí pues, espero poder estar en un Rock in Rio antes de ponerme en verdad demasiado vieja… jeje.
@Alberto, es verdad… aunque en realidad no sé si Axl mantiene vivo el legado de los Guns o si es al revés 😀
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En definitiva el concierto completamente en vivo (virtualmente claro) que más he disfrutado, fue el de Coldplay, cada una de sus letras me recordaba algo, esa escenografía era extraordinaria, y escuchar los gritos de las personas, wow!!! en ese momento me declaré fan de Coldplay.
Respecto a Guns,la vdd es q esperaba mucho + de ellos, y al salir al escenario no utilizaron a su favor el paso de los años. Los años pasan lo sabemos, pero ¿por q querer remontarse a su época de juventud, si ya no les va? a fin de cuentas, tambn lo disfruté, pero no tanto como hubiera querido.
Te mando un gran saludo, me encanta encontrar periodistas de otros países y con puntos de vistas diversos al mio Online. Abrazos! =D
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