No sólo los pelícanos, sino toda una cadena alimenticia oceánica basada en la anchoveta peruana (Engraulis ringens), tendrán la enorme y feroz competencia de la gran pesca industrial, cuya temporada oficial se iniciaría (si no se da marcha atrás) este 17 de noviembre con una meta de 1.11 millones de toneladas. Son noticias bastante malas desde el punto de vista ecológico, o mejor dicho, que nos anuncian un crimen de lesa ecología.
Origen: Anchovetas en fuga
Deja una respuesta